La belleza no existe fuera de ti.
Tú decides que es bello y que no.
Es tu mirada y tus sentimientos los que dentro de ti otorgan la belleza a lo contemplado.
Ante un mismo paisaje, cuadro, persona o cosa dos personas pueden ver y sentir diferente.
Quién tiene la razón?
No es cuestión de razón es cuestión de corazón.
La belleza requiere capacidad de sorprenderse que solo nace en una mente de aprendiz y una actitud de principiante. Es decir, que sólo se que no se nada.
Ya está la belleza dentro de nosotros y por eso la sabemos reconocer. Somos la más excelsa expresión de la belleza.
Qué ocurre entonces?
Nuestro Ego puede estar señoreando nuestra mente y cuerpo y estableciendo creencias que te impidan ver quien eres en realidad.
Pero la belleza sigue dentro de ti protegida y encapsulada en un lugar donde nadie puede entrar para robartela y ese, no es otro, que tu corazón.
Las modas son de la mente y el cuerpo que generan pasajeras emociones expansivas.
Desde dónde contemplas la belleza?
LA BELLEZA es del corazón.
Estamos rodeados de seres bellos a los que no somos capaces de reconocer. Yo los llamo ángeles. Suelen ser personas que aparecen en los momentos más necesarios de nuestra vida, cuando el dolor y el sufrimiento nos va comiendo poco a poco, inexorablemente. Ábreles la puerta de tu corazón. Ellos han sufrido antes que tú y ese sufrimiento es el que les da esa belleza. Y repito: no los verás con los ojos. Sí con el corazón.