Quién sólo es capaz de cazar mariposas para venderlas será capaz de apropiarse de los sueños de otros para venderlos.
Quién es capaz de contemplar una mariposa es capaz de reproducir su.belleza en sus sueños y en su vida.
Llegará un día que nadie venda mariposas ni sueños porque nadie quiera comprarlas.
Ese día el vendedor estará vendido y será el soñador quién en su mano ponga una mariposa y le enseñe a volar.
Te has llevado mi sueño pero aún conservo el alma para crearlos y esa no es tuya porque no es mía porque esa es de Dios.
Adiós cazador, en la plaza te espero, en la plaza vacía donde nada vende el vendedor….adiós.