En el nuevo camino sólo me quedé.
En el nuevo camino fui asaltado, apelado y en la cuneta me quedé.
Me levanté y proseguí.
Salté, brinque, pero sobre todo prediqué.
Creí estar sólo, pues sólo me quedé, más de los lados del camino, campos montes y aldeas, gente empecé a ver.
Me miraban sonriendo escuchaban mi canción:
«Vive atento, vive siempre con atención, que la vida es un ahora vivela con ilusión»