MIEDO AL FUTURO
¿Qué va ser de nosotros? decían nuestros abuelos al contemplar un presente contractivo y desolador y mirar al futuro.
Hoy en nuestra sociedad, barrio y familia hay hombres y mujeres que tienen hoy esa misma sensación: MIEDO.
Para ellos el paso de año representa una esperanza: que el año que entra sea mucho, mucho mejor, que el que se va.
Ese sueño de abundancia queda en muchas ocasiones en un juego mental, a lo sumo sentimental. Y no pasa de ahí.
Sin herramientas aunque tengas la mejor madera no construyes un barco. Y sin plano aunque dispongas de ellas no podrás avanzar al ritmo adecuado o deseado.
La fe y la esperanza precisan del amor. La esperanza y el amor de la fe. El amor y la fe de la esperanza.
¿Dónde están?
En el corazón. En el tejido neuronal del corazón, ese que ahora se ha descubierto que es el que manda, pero solo manda cuando estamos alineados en cuerpo, mente y espíritu.
¿Conoces a alguien que lo esté pasando mal?
Ponte delante de él mírale a los ojos y dale un abrazo consciente. No le digas nada, no verbalices,
solo fundiros en un abrazo consciente. Ahora, con el sentimiento que te haya provocado apartarte y medita lo que estás sintiendo. Atento, tu sabiduría interior está aportando claves.
Al otro déjale marchar que siga su proceso. Le has aportado amor y el amor jugará su papel en su momento.
¿Dudas de la eficacia?
¿Dónde está tu fe?
¿Temes hacer el ridículo?
¿Dónde está tu esperanza?
¿Te parece absurdo?
¿Dónde está tu amor?
Las NEURONAS ESPEJO. Tal vez un concepto aporte a tu mente algo de luz racional y desprenda una chispa para tu corazón.
Hoy quiero soñar y sueño que todos los hombres y mujeres conscientes de su poder se abrazan conscientemente y activan así el poder insondable que su Creador puso en su Ser. Mi sueño para 2014. Cada vez somos más.
Siempre Adelante.
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